Me parece muy importante transversalizar, en el proceso de enseñanza, la humildad y la persistencia que nos enseña San Francisco de Asís. Además, es fundamental en nuestra Universidad tener metodologías incluyentes, así como también promotoras de la ética, la solidaridad, también debe centrarse en el acompañamiento entre los colegas.
De igual manera, el Franciscanismo implica desde su esencia tener una posición de simetría en la vida académica e institucional. De esta manera, se debe tener en cuenta que la palabra de todos tenga valor, una palabra formada y formadora, con un trasfondo crítico respetuoso.
Reflexión
William F. Espinosa García | 12.06.2018